¿Quieres mejorar cada día y acercarte a la mejor versión de ti mismo? Pon en práctica las siguientes actitudes.
Trabaja la generosidad y el agradecimiento
La gratitud nos ayuda a superar los traumas y el estrés, se incrementa nuestra autoestima y nos ayuda a disolver los sentimientos negativas. Varios estudios han demostrado que la solidaridad está de manera directa relacionada con la paz, la salud, y la longevidad. Los actos de bondad hacen que nos sintamos bien con nosotros y los sentimientos positivas que generamos hacen que tengamos una más grande capacidad de recuperación psicológica y física.
Mantén una actitud positiva
Si deseamos mejorar como personas, y ser más felices, debemos puesto que laborar nuestra reacción ante la vida, algo bastante estudiado en los últimos años por la psicología positiva. De la misma forma que promulga esta corriente de la psicología, la felicidad no es algo que se logre conseguir: no es una meta, es un estado que debería prepararse cada día. Si no buscamos una lectura optimista de las cosas la infelicidad va a ser una constante y contagiaremos esta a nuestros propios seres más queridos. Es decir importantísimo si deseas proteger a la población que te circunda, así sea tu familia, tus amigos, o tus colegas. Es mejorar analizar y sacar lo mejor de cada situación, ya que al ver lo bonito de la vida contagiaremos esa energía a todos los que nos rodean.
Cultiva estas dos actitudes y tu vida cambiará para bien.
Si te interesan los contenidos sobre crecimiento personal y estilo de vida visita el blog del coach Ignacio Escobosa.